Garantía de productos

La persona vendedora está obligada a entregarte productos y/o servicios que sean conformes con el contrato de compraventa y responder ante ti de cualquier falta de conformidad que se manifieste en un plazo de tres años desde la entrega. En cuanto al suministro de contenidos o servicios digitales, el plazo es de dos años.

 

 

En el caso de compraventa de productos de segunda mano, puedes pactar con el vendedor un plazo más corto, que no puede ser inferior a un año desde la entrega.

A no ser que se demuestre lo contrario, aquellas faltas de conformidad que se presenten en los seis meses después de la entrega del producto, sea nuevo o de segunda mano, se presupondrá que ya existían antes de la entrega.

Debes informar a la persona vendedora de la falta de conformidad del producto con el contrato en el plazo de dos meses desde que tuviste conocimiento. En caso de que esto no sea posible puedes reclamar directamente al productor.

Si el producto no es conforme con el contrato, puedes optar entre exigir su reparación o sustitución, excepto en el caso de que una de estas dos opciones resulte objetivamente imposible o desproporcionada.

La reparación de los productos en garantía debe ser completamente gratuita y se debe hacer en un plazo razonable y sin inconvenientes para ti, de modo que mientras dure la reparación, se suspende el cómputo del plazo de garantía.

La reparación tiene una garantía de 6 meses y en caso de que hayas optado por la sustitución, no se inicia un nuevo plazo de garantía, sino que se vuelve a activar el cómputo del plazo pendiente de la garantía del producto original.

Cuando ni la reparación ni la sustitución sean posibles se puede optar por el retorno del producto, el retorno de la cuantía pagada o la rebaja del precio cuando la reparación sea leve.

Durante un plazo mínimo de 10 años desde que un bien deja de fabricarse, debe garantizarse la existencia de un servicio técnico adecuado posventa y de piezas de recambio, de las cuales no se podrá incrementar el precio en las reparaciones.

Aparte de la garantía legal, los establecimientos te pueden ofrecer una garantía comercial que amplíe la cobertura. La garantía comercial, a diferencia de la garantía legal, podrá estar condicionada o limitada.

En caso de falta de conformidad de un producto, contacta con la empresa por escrito de manera que quede constancia o pide la hoja oficial de reclamación a la empresa.